La rutina de noche facial es la más importante para el cuidado de la piel del rostro. Es, durante las horas de sueño, cuando el cuerpo absorbe mejor los diferentes principios activos de las cremas y lociones para el cuidado de la dermis. Contar con unos pasos claros te ayudará a cuidar de ti y sentirte revitalizado cada mañana.

El paso a paso de una rutina de noche facial

A lo largo del día expones la piel a la acción del sol, a la contaminación, a los dispositivos electrónicos o a la deshidratación. La rutina de noche se encarga de revertir estos efectos, ayudándola a recuperarse de todas las agresiones que sufre.

Durante la noche, la piel es capaz de absorber más oxígeno, dando lugar a una regeneración natural. Nuestra rutina es el complemento perfecto para incentivar y lograr unos mejores resultados.

Además, la rutina puede ser un hábito que te ayude a relajarte y desconectar del estrés diario. Cada paso puede convertirse en un momento de mimo y cuidado que calme tu mente y te predisponga a un descanso profundo. Una buena rutina es capaz de cuidarte por dentro y por fuera.

La limpieza como base

Limpiar la piel del rostro es el paso más básico y principal. Lo primero es desmaquillarse, puedes requerir un producto específico como un bifásico de la marca Orlane que suprima los restos de rímel.

Lo segundo es lavarse con el objetivo de desprenderte de los restos de sudor y suciedad. Para ello, puedes emplear un jabón neutro. Al acabar, asegúrate de enjuagarte bien a fin de eliminar los restos de productos.

Con la piel limpia y lista llega el momento de comenzar con los diferentes cosméticos de tu rutina nocturna. Cerciórate de usarlos por orden y siempre aquellos que van bien con tu piel.

Tónico para la preparación

Es el primer producto que deberías aplicarte, será el responsable de preparar la piel para conseguir que absorba el resto de los productos. Puede parecer que no hace gran cosa, pero resulta imprescindible. Su función es asegurarse de que la dermis actuará como una esponja.

Existe una gran variedad de propuestas en el mercado, pero no está de más escoger uno con efecto calmante. Por ejemplo, el tónico facial calmante de Babaria es una acertada elección. Se trata de un producto económico, pero muy eficiente, de una de las marcas más prestigiosas del sector. Otra excelente opción es el tónico desmaquillante exprés de Clarins, que combina los dos primeros pasos de tu rutina en un solo producto.

Sérum para la renovación de la dermis

Este producto es básico tanto en la rutina de la mañana como en la de la noche. Para la primera lo mejor es optar por aquellos que integran vitamina C entre sus principios activos. Pero en el caso de la noche se persigue una acción más revitalizante.

Un buen ejemplo es el retinol, este ingrediente favorece la estimulación del colágeno, del ácido hialurónico y de las fibras elásticas de la piel. Existen múltiples sérums que cuentan con él, pero el Regenerist Retinol24 de Olay es uno de los más apreciados por los consumidores. Otra buena alternativa es Revitalift Laser Sérum de L'Oreal.

Los ojos se merecen un cuidado especial

La zona de los ojos es una de las que más sufre a lo largo del día. Además, es de las más propensas a la aparición de arrugas y signos de envejecimiento, por todo ello se merece un cuidado más especial.

Un contorno de ojos es una gran solución que te ayudará a lucir una mirada más luminosa al levantarte por la mañana. El Total Eye de Clarins es una buena opción, además puedes incluirlo en tu rutina matutina para lograr un mejor agarre del maquillaje.

Crema hidratante para nutrir

Por último, llega el momento de la hidratante. Es importante que selecciones una concebida para la noche, ya que, contienen más nutrientes para mejorar la regeneración de la piel. En este caso, el abanico es muy amplio y resulta indispensable elegir aquella que se adapte a tu tipo de piel y a tu edad.

Por ejemplo, para pieles maduras puedes probar la Age Perfect de L'Oreal que cuenta con un gran efecto reafirmante. Para otro tipo de pieles, puedes decantarte por la Skin Active de Garnier, su textura de gel aporta frescor y despliega un efecto relleno, al tiempo que el aloe vera y el aceite de argán nutren de forma intensa.

Los pasos extra

Esta era la rutina más sencilla y de diario para ti. Si te interesa llevarla un paso más allá, puedes añadir unos complementos que te permitirán conseguir un efecto más potente. Estas son dos opciones que te pueden venir de maravilla.

El exfoliante

La exfoliación ayuda a suprimir las células muertas y los puntos negros, al tiempo que contribuye a la apertura de los poros, acabando con las imperfecciones y las espinillas. Este paso debe ser previo al uso del tónico y es recomendable llevarlo a cabo una vez por semana.

Para ello, puedes emplear un exfoliante natural con base de arroz como el de Nivea. Entre sus ingredientes incluye arándanos y su intensidad media lo hace perfecto para casi cualquier tipo de piel.

La mascarilla facial

Una alternativa al exfoliante es la utilización de mascarillas, algo especialmente recomendable si notas la piel muy seca. Aportan luminosidad y un plus de hidratación que se traduce en vitalidad. En este caso, puedes aplicarla un par de veces por semana antes del tónico.

En este caso, dispones de una nutrida disparidad de productos que incorporan diferentes principios activos. El carbón negro desobstruye los poros y favorece la eliminación de las toxinas, el té verde es perfecto para activar la renovación celular y el chocolate provee de antioxidantes. Puedes descubrir estas variedades y muchas más en la marca SYS.

No te olvides, la rutina de noche facial resulta decisiva para ayudar a la regeneración natural de la piel. Sigue estos pasos y emplea los productos adecuados para sacarle el máximo partido. Aprovecha cada uno de ellos para reconectar contigo mismo tras un día estresante.